¿ENAMORADA O ACOSTUMBRADA?
¿Sientes que estás en una relación en la que todo al principio era color de rosa, pero que últimamente las maripositas que sentías en el estómago se fueron a volar a otra parte porque tú ya no las sientes más? ¿Tus amigas te dicen que probablemente lo tuyo sea costumbre y ya no estés enamorada?
Lo primero que debes saber es que existen dos diferencias en estar enamorada y amar a una persona. La primera científicamente probada, origina en el ser humano una fase de alegría constante, ilusión y una sensación plena de vivir. El detalle está en que si de pronto ya no sientes esto, piensas inmediatamente que tu relación ya no da para más. Esto puede llegar a confundirte, y pensar que se acabó el amor. Cosa que no es totalmente cierta, ya que después de la etapa del enamoramiento donde normalmente idealizas a la persona con la que estás, y es muy difícil para ti encontrarle defectos, pasas a una etapa de calma, de cierta estabilidad emocional que puede llegar a confundirse con costumbre.
Si sientes esto, es aconsejable que analices tus sentimientos. Ya que puede ser que tienes una relación estable, que aceptas a tu pareja tal y como es. Conoces sus defectos y virtudes. Pero que probablemente la relación está cayendo un poco en la rutina. Lo mejor en estos casos es hablar sobre lo que ambos sienten y proponerse no caer en el aburrimiento. Pueden ir a lugares nuevos, hacer cosas distintas, en fin, evitar la monotonía.
Si sientes esto, es aconsejable que analices tus sentimientos. Ya que puede ser que tienes una relación estable, que aceptas a tu pareja tal y como es. Conoces sus defectos y virtudes. Pero que probablemente la relación está cayendo un poco en la rutina. Lo mejor en estos casos es hablar sobre lo que ambos sienten y proponerse no caer en el aburrimiento. Pueden ir a lugares nuevos, hacer cosas distintas, en fin, evitar la monotonía.
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Por otro lado si definitivamente ya no sientes lo mismo cuando estás con él, los defectos ya te comienzan a molestar y tratas en lo posible de evitarlo. Entonces aunque sea difícil de aceptar, quizás ya no estés más enamorada. Te damos unas pautas para que analices mejor y tengas más claro lo que sientes.
- En una hoja de papel haz una lista de las virtudes de él, y enuméralas. Al costado, haz la lista de sus defectos, también enuméralos. ¿Cuál es la más larga? ¿Virtudes o Defectos?
- No pudieron verse por motivos de trabajo, estudios u otros, ¿Lo extrañas?
- Piensas que tu vida no será igual si no está él?
- ¿Cuántas veces en el día te acuerdas de él?
- Te pasó algo muy lindo, ¿No ves la hora de contárselo?
- ¿Han dejado de tener intimidad porque ya no te atrae como hombre?
- ¿Te ves con él en un futuro?
qué es lo que sientes por él. Si te das cuenta, por ejemplo, que ya no te ves con él en un futuro, o si la lista de defectos es mucho más grande que la de virtudes, entonces es mejor que reconsideres tu relación, que seas honesta con él, y sobre todo contigo misma. No es fácil terminar, pero a veces es aconsejable antes de caer en la rutina y que comiencen los conflictos entre ustedes.
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